
Se considera accidente laboral cualquier lesión física o mental que ocurra en el ejercicio de la actividad laboral o en el trayecto entre el domicilio y el lugar de trabajo, siempre que sea en un recorrido habitual y directo. También se contemplan las enfermedades profesionales, es decir, aquellas dolencias que surgen como consecuencia de la tarea desempeñada, como la exposición a sustancias químicas peligrosas o lesiones por movimientos repetitivos.
Las empresas están obligadas a contratar una Aseguradora de Riesgos del Trabajo (ART), entidad que se encarga de brindar asistencia médica y cubrir los gastos derivados del siniestro. En caso de un accidente, el empleado debe informar de inmediato a su empleador, quien tiene la obligación de comunicarlo a la ART para que esta disponga las prestaciones médicas necesarias. Si la compañía no cumple con este deber, el trabajador puede realizar la denuncia directamente ante la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT).
Los derechos de la persona afectada incluyen la atención médica integral, la provisión de medicamentos y tratamientos, el pago de indemnizaciones en caso de incapacidad y la cobertura del salario durante el período de recuperación. También se contempla la rehabilitación y, si es necesario, la reubicación en un puesto acorde a las nuevas condiciones físicas del trabajador.
Uno de los problemas más frecuentes es la negativa de algunas ART a reconocer ciertos accidentes como laborales. En estos casos, el damnificado puede iniciar un reclamo ante la Comisión Médica de la SRT para que se evalúe su situación. Si el resultado no es favorable, tiene la opción de acudir a la justicia para exigir el reconocimiento del siniestro y el pago de la indemnización correspondiente.
Los empleadores, por su parte, deben garantizar un ambiente de trabajo seguro, proporcionar los elementos de protección adecuados y capacitar al personal en materia de prevención. Cuando se detectan irregularidades, como la falta de medidas de seguridad o la omisión de la afiliación a una ART, la empresa puede ser sancionada e incluso enfrentar demandas judiciales por daños y perjuicios.
En el contexto actual, donde el teletrabajo se ha vuelto una modalidad frecuente, han surgido debates sobre la responsabilidad del empleador en accidentes ocurridos en el hogar del trabajador. La normativa aún está en proceso de adaptación a esta realidad, pero se han reconocido ciertos casos donde la ART debe brindar cobertura, siempre que se demuestre que el hecho ocurrió en el marco de la jornada laboral.
Conocer los derechos y obligaciones en materia de accidentes laborales es esencial para que los trabajadores puedan exigir el cumplimiento de la ley y recibir la asistencia que les corresponde. También es una responsabilidad de las empresas, que deben adoptar todas las medidas necesarias para evitar incidentes y garantizar la seguridad de su personal.